6 de mayo de 2016

Non finito: refundición y plagio de un texto de Óscar de la Torre

Por Julio César Galán

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Hace años, allá por el 2006, le comenté a Diego Jesús Jiménez, amigo y maestro, que mi intención poética necesitaba dar cuenta de la amplitud del poema, de todo aquello que se queda por el camino. En su momento no me decidí con Tres veces luz y acabé por normalizarlo (El primer día (2) se mantuvo oculto hasta su justa consumación), pues este libro contenía aquello que vendría después: Inclinación al envés (Pre-textos, 2014) y aquello que aún no había enseñado en El primer día, poemarios que me van a servir para hablar un poco sobre identidad y concepción del texto poético. Empecemos por una serie de aforismos que son caros a cuanto quiero decir: 1.) “El proceso es el fin”; 2.) El poema es un aprendizaje por error, así que hay que mostrar también esos errores”; y 3.) “Crear es interpretar y viceversa”. Estos aforismos quieren dar cuenta de la poesía como transcurso y transformación incesante; quieren sacar el antes, el durante y el después del poema, así como las identidades que lleva dentro; quieren reflejar todo un conjunto de transtextualidad, hipertextualidad, paratextualidad, etc., el cual expone su visión del texto a modo de metamorfosis (también, de la identidad del autor y de sus otredades) o como versión plural y proteica. 
La muestra de las distintas vidas de un poema por medio de múltiples notas, de versos excluidos, de lectores integrados en el texto, heterónimos, versiones, reescrituras, tachados, lexicalizaciones, símbolos que hablan del inacabamiento de cada textualidad, etc, exponen todo un abanico de logofagias. Con este arsenal se intenta, en esencia, revelar la sinceridad de uno mismo con la creación poética, es decir, no caer en la concepción del poema como espacio cerrado, concluido y perfecto. Nos encontramos en la diseminación como una pluralidad de sentidos del texto y desde aquí podemos tomar, transformando a Derrida, las re-creaciones como reflejo de esa variedad.
En cada texto hay una labor oculta de reescritura, a veces palpable en borradores y revisiones que dan cuenta de su proceso genético, creando una serialización de espejos sobre el poema último. Corrección y reescritura: un elogio del boceto. Por eso, la creación poética, desde este punto de vista que vengo exponiendo, es un conjunto “de huellas del texto primitivo”. Versiones de un texto, un libro en el que se presenten los esbozos y las correcciones: una traducción de lo inacabado. Non finito.